Antes el tiempo corría de manera que la brisa no tenia quien la imitará, que la supremacía solar ganaba encanto en la noche; ahora los carros imitan el viento en su transitar y las luces nunca nos dejan estar a oscuras intentan en ocasiones con éxito apartan nuestra mirada del cielo con el objetivo concentrarnos en la urbe, esa que consume nuestras respiraciones, esa que se traga nuestros suspiros y los convierte en ocasiones en contaminación.
Huir parece la única salida, nadar contra la corriente es inevitable, “llorar para limpiar, no para contaminar” el mejor paso a seguir desde mi sentir es navegar en la naturaleza siendo parte de ella, somos animales y no podemos perder la comunicación con la PACHA MAMA.
Feliz 2011
